Como ocurre al cierre de cada temporada, la Federación Internacional de Tenis (ITF, por sus siglas en inglés), selecciona a quienes considera que han sido los mejores jugadores del año, tanto para el Tenis femenino como para el masculino. En esta ocasión quienes se consagraron como “campeones del mundo” en la modalidad de singles son Serena Williams y Novak Djokovic.
Por el lado de la tenista norteamericana, basta con mencionar que acaba de cerrar otro año en el puesto Nº 1 del ranking WTA, consiguió su decimoctavo Grand Slam (se trata del US Open 2014, con el que igualó el record de Martina Navratilova y Chris Evert), y se consagró campeona de las Finales WTA de Singapur, entre otros logros.
En lo que respecta al serbio, este año recuperó el puesto Nº 1 del ranking ATP, ganó su séptimo Grand Slam (Wimbledon) y fue el ganador de las Finales ATP de Londres. Con este reconocimiento de la ITF se convirtió en uno de los cuatro jugadores que han sido consagrados como “campeones del mundo” en cuatro o más ocasiones.
Si para muchos no es una sorpresa que Serena Williams y Novak Djokovic recibieran estos premios, tampoco lo será el otorgado a la categoría de dobles masculinos, que quedó en manos, por undécima vez en doce años, de los hermanos Bob y Mike Bryan (esta temporada ganaron su decimosexto Grand Slam y su título Nº 100 en el circuito ATP, también fueron los mejores en las Finales ATP).
El último premio, destinado a la modalidad de dobles femenino, fue para las italianas Roberta Vinci y Sara Eran, por tercer año consecutivo (este año se quedaron con el único Major que les faltaba, Wimbledon, ganaron el Abierto de Australia y fueron finalistas en Roland Garros.