Seguramente Daniel Orsanic nunca podrá olvidar su debut como capitán del equipo argentino de Copa Davis. Es que la serie ante Brasil por el Grupo Mundial, disputada el pasado fin de semana en Buenos Aires, estuvo cargada de emociones y donde los visitantes demostraron que vinieron dispuestos a dar batalla, llegando a estar muy cerca de la clasificación.
Sin lugar a dudas, Orsanic y el capitán de Brasil, Joao Zwetsch, hicieron una muy buena selección de jugadores. La serie terminó siendo pareja, tanto en el desempeño de los tenistas como en los marcadores que se fueron dando. Pero siempre tiene que haber un ganador y, en este caso a puro corazón, fue Argentina.
La serie comenzó el viernes con una sorpresa para los locales, el brasileño Joao Souza se impuso a Carlos Berlocq (6-4, 3-6, 7-5, 6-3 y 6-2), de gran experiencia en Copa Davis. Para el segundo punto, Leonardo Mayer volvió a poner a Argentina en carrera, tras vencer a Thomaz Bellucci (6-4, 6-3, 1-6 y 6-3).
La jornada del sábado venía complicada de antemano para el equipo argentino, dado que Brasil iba a poner en cancha a dos experimentados jugadores de la modalidad de dobles, Marcelo Melo y Bruno Soares, Nº 3 y Nº 12 del ranking ATP de dobles, respectivamente. Las previsiones se cumplieron y los visitantes se quedaron con el tercer punto de la serie.
Estando otra vez abajo en el marcador general y con la obligación de ganar para forzar la disputa del quinto punto, Argentina apeló una vez más a Leonardo Mayer, para enfrentar a Joao Sousa. Seguramente ni ellos, ni ninguno de los que estuvieron el domingo en Tecnópolis o viendo el partido por televisión, imaginaron lo que sucedería. El match tuvo una duración de 6 horas y 42 minutos, pasando a la historia como el más extenso jugado sobre polvo de ladrillo y el más largo en la modalidad de singles dentro de la Copa Davis. Mayer fue el ganador (7-6, 7-6, 5-7, 5-7 y 15-13), pero acabó deshidratado y con calambres, debiendo ser atendido por el cuerpo médico, llamada de alerta para la Federación Internacional de Tenis, que sigue promoviendo los partidos a cinco sets.
La extensión del partido por el cuarto punto, obligó a la organización a postergar para el lunes la disputa del quinto, necesario para definir al ganador de la serie (se jugó solo el primer set). Como lo había anunciado previamente, Orsanic seleccionó a Federico Delbonis, debutante en Copa Davis, para jugar ante Thomaz Bellucci. No se cobraron entradas para presenciar el match, esto ayudó a crear un marco increíble, que aumentaba aún más la presión para los jugadores.
El clásico sudamericano se siente en todos los deportes y el Tenis no es la excepción. Pero en la jornada del lunes fue Delbonis el que estuvo más consistente, y pudo reponerse al hecho de haber perdido el segundo set. Bellucci volvió a mostrar los mismos problemas que no le permiten terminar de consolidarse en el circuito ATP y cedió en momentos clave. Marcador final: 6-3 (jugado el domingo), 3-6, 6-2 y 7-5.
Argentina volvió a conseguir una agónica victoria por Copa Davis, la anterior fue en septiembre del año pasado cuando aseguró su presencia por una temporada más en el Grupo Mundial, luego de derrotar a Israel. Aunque ahora es tiempo de celebración, Orsanic y su equipo también comienzan a pensar en su próximo rival, Serbia, con Novak Djokovic a la cabeza, en duelo que tendrá se desarrollará en el mes de julio.
Fotografía: gentileza Copa Davis. El equipo argentino festeja luego de que Federico Delbonis consiguió el quinto punto de la serie.
